Muchas parejas deciden celebrar su boda en pleno verano para evitar lo máximo posible el mal tiempo y se sienten preocupadas por si la contrapartida es, por ejemplo, una ola de calor.
Mi consejo para esos novios que se casan en junio, julio y agosto (incluso principios de septiembre) es, en primer lugar, que busquen una finca con suficiente sombra que haga que baje la temperatura. Ésto ayudará a que tanto los invitados como los propios recién casados se sientan más a gusto y dispuestos a disfrutar de la celebración.
Además de pensar en ése lugar acorde con la fecha de la celebración, una idea muy extendida y aceptada es completar el aperitivo o cóctel con una barra de mojitos.
Hay empresas que ofertan la barra de mojitos para ubicarla durante el baile, pero tiene más puntos negativos que positivos. Durante la barra libre muy pocos invitados optarán por solicitar éste tipo de combinado y, en su gran mayoría, optarán por lo que consumen habitualmente cuando disfrutan de una velada de fiesta y "bailoteo".
Acomodar los mojitos al aperitivo hará que vuestros invitados disfruten más del detalle que habéis tenido para con ellos. Un combinado fresco, que puede hacerse con y sin alcohol, y en un corner decorado para el efecto.
Es importante también, que esa barra de mojitos no sea un free service. Es decir, lo mejor es que sean combinados preparados en el momento, con una persona especializada en coctelería para que cada invitado pueda disfrutar de un buen mojito que no esté aguado ni "precocinado". Porque aunque parezca que no, la diferencia es abismal.
Os dejo un ejemplo con las fotos de la última barra de mojitos que decoré en La Peña del Agua, para que os hagáis una idea de lo que os comento en este post.
Al rico mojito!!
